Errores Al Hacer Ayuno Intermitente

Dentro del blog hemos hablado bastante sobre el ayuno intermitente, pero me parece que hemos dicho poco sobre los errores frecuentes que se cometen al adoptar este patrón de alimentación. Y es que al ser algo cada vez más frecuente ahora estos errores salen cada vez con mayor frecuencia a la luz.

En esta entrada abordaré cada uno de estos errores y te ayudaré a evitar caer en ellos pero sobre todo a una vez cometidos, darles una solución óptima. Si bien el ayuno intermitente es sumamente benéfico para nuestro cuerpo (sobre todo en nuestro mundo actual donde hay comida 24 horas 7 días a la semana), hacerlo de la manera incorrecta anulará todos los beneficios que hayamos podido conseguir.

Como ya debes saber, el ayuno intermitente es hacernos conscientes de las horas que pasamos sin consumir alimentos, principalmente sólidos o líquidos con azúcar. Todos hacemos un ayuno gracias a que durante la noche mientras descansamos, no estamos consumiendo ningún alimento, el ayuno intermitente ofrece la idea de contar un número determinado de horas desde nuestra última comida del día hasta el desayuno del día siguiente.

Y ojo aquí, desayuno no significa comer a primera hora del día, sino más bien esa comida que rompe el ayuno, por ello el nombrecito: des-ayuno. Con el boom del ayuno intermitente, descubrimos que somos bastante capaces de enfrentar la mañana sin alimento. Al final del día por un término evolutivo todos estamos perfectamente capacitados para lograr una mañana así, sin embargo la desinformación, dogmas y desayunos cargados de carbohidratos simples nos han hecho creer y sentir lo contrario.

Muchas personas y principalmente los niños realizan un ayuno intermitente de manera natural, pero repito, ideas sembradas por la industria alimentaria nos han hecho creer que necesitamos un cereal divertido o fitness para arrancar el día.

Una vez que recuperamos nuestro poder de ayunar, puede surgir la loca idea de ayunar hasta el infinito y más allá o bien de querer obligar al cuerpo a cumplir con nuestras exigencias, esto es un grave error, el cuerpo verdaderamente es muy sabio y si está enviando la señal de hambre, es nuestro deber brindarle alimentos que lo nutran.

Suelta cualquier ideal de horas de ayuno y escucha a tu cuerpo cada día y a cada momento.

A raíz de que se popularizó la idea de que el ayuno intermitente activa la autofagia y todos los beneficios que este proceso envuelve por sí mismo, las personas comenzaron a implementar el ayuno intermitente, pero aunado a la obsesión con pasar muchas más horas de ayuno de la que nuestro cuerpo puede tolerar, muchas personas suelen romper el ayuno con alimentos bajos en calidad nutricional.

Es normal que tras bastantes horas de ayuno y al estar al borde del desmayo (señal de pésimo ayuno intermitente) el cuerpo en su inmensa sabiduría te envíe señales de querer alimentos ricos en energía que evidentemente son carbohidratos simples y si en tu cocina solo hay galletas y panes eso será lo que rompa tu ayuno y también arruine todo el trabajo que habías realizado.

Por ello es sumamente importante hacer sólo el número de horas de ayuno que no nos hagan perder la cordura, este número va a variar de persona en persona, también es importante que al romper el ayuno tengas a la mano alimentos ricos en nutrientes, a mi me gusta tener algunos vegetales ya sean cocidos o crudos y comerlos mientras está lista la proteína que vaya a consumir y monte mi delicioso primer plato post ayuno.

Retomando el ejemplo de un mal ayuno en el cual estamos al borde del colapso, es también sumamente normal que nos abalancemos sobre nuestra comida, entorpeciendo totalmente la señal de saciedad que se da al comer de manera pausada y consciente. Recuerda las sabias palabras de Gandhi: Bebe tus alimentos y mastica tus bebidas.

El proceso adecuado de masticación no sólo contribuye a la captación de la señal de saciedad que nos envía nuestro cerebro, también es la manera adecuada de tener una perfecta absorción de nutrientes y digestión de los residuos de nuestros alimentos.

Comer hasta tener la necesidad desabotonar nuestro pantalón es el peor indicador de que hemos comida mucho más de la cuenta. De manera ocasional me parece que es algo común en los seres humanos sobre todo cuando hay eventos importantes como el fin de año, estamos acostumbrados a festejar con abundante comida, pero ojo, que sea una costumbre no significa que sea necesariamente adecuada y mucho menos si estamos haciendo esto en cada día que estamos haciendo ayuno intermitente, que en muchos casos suele ser a diario, aunque esto también varía de persona en persona.

Salvo que te estén preparando para una cirugía o vayas a realizarte alguna prueba de laboratorio, no hay otro remedio que seguir la orden de ayunar aún en contra de nuestra señal de hambre, pero si estás haciéndote pasar hambre porque te has casado con la idea de que “debes” ayunar equis número de horas o hacer ayuno intermitente equis número de veces a la semana, estás de nueva cuenta cayendo en un error.

Créeme, conozco perfectamente bien las causas de querer obligarnos a ayunar, las cuales pueden ir desde sensaciones placenteras hasta cuestiones de ego, pero POR FAVOR no empieces una batalla contra tu propio cuerpo, si tienes hambre solo tengo algo que decirte: COME COMIDA DELICIOSA Y RICA EN NUTRIENTES.

Recuerda que en Fit Fighters no estamos peleados con la comida baja en nutrientes, sabemos que existen y sabemos lo deliciosa que es, no pretendemos en ningún momento eliminar estos alimentos ni de la faz de la tierra, ni de tu dieta si es que es algo que te gusta, lo importante siempre será darle prioridad a los alimentos que la madre tierra nos brinda.