Gasto Energético no programado: ¡Elimina grasa sin hacer dieta!
Existe un proceso en tu cuerpo llamado NEAT, acrónimo de Non-Excersice Activity Thermogenesis, que en español y para que se entienda sería el Gasto Energético no programado. Este hace referencia a toda la actividad física que llevas a cabo durante el día, sin contar tus sesiones de entrenamiento, incluyendo caminatas casuales, ir de compras, hacer quehaceres en tu casa, etc.

Importancia
Lo fundamental del Gasto Energético no programado es que explica por qué existe tanta diferencia en la cantidad de calorías que gastan diferentes tipos de individuos en su vida cotidiana (excluyendo el ejercicio estrictamente hablando).
La obesidad es un enorme problema que afecta a miles de personas alrededor del mundo. Una de las razones por las que la gente tiene sobrepeso o tendencia a este es que poseen niveles de NEAT muy bajos. La buena noticia es que poniendo en práctica los tips que te daremos hoy podrás perder más grasa sin la necesidad de hacer dieta.
Opinión Científica
El Dr. James Levine, endocrinólogo, investigador y especialista en el tema, expresa que “Las personas obesas son profundamente más sedentarias que las delgadas. En promedio se mueven 2,5 horas menos al día, lo que produce una diferencia de aproximadamente 350 calorías diarias respecto a sujetos más físicamente más activos”
Para la mayor parte de los individuos, el Gasto Energético no programado representa alrededor del 30% de las calorías gastadas en el día, pero puede disminuir hasta el 15% en sujetos sedentarios e incrementarse hasta un 50% en personas activas.
Caminar contribuye en gran manera al NEAT, obviamente el tipo de trabajo que tengas también afectará. Si te pasas el día sentado frente a una computadora tus niveles probablemente serán bajos, por el contrario, si durante tu jornada laboral te mueves mucho, o realizas actividades que requieren algún esfuerzo físico tus niveles serán muchos más elevados.
El hecho de que la mayoría de personas pase el día sentado frente al televisor, laptop o celular navegando en las redes sociales, mirando vídeos y jugando juegos no es un factor menor al considerar la problemática de la obesidad. Nos hemos convertido en una sociedad sedentaria y dependiente de la tecnología. Hace no más de 150 años el 90% de la población del mundo trabajaba en la agricultura o llevaba a cabo algún tipo de labor física para vivir.

Posibles Soluciones
Probablemente pienses que el Gasto Energético no programado sea muy trivial para producir un verdadero cambio, y si lo miras de manera aislada quizás tengas razón, pero si acumulas todas estas pequeñas modificaciones en tu comportamiento y logras sostenerlas a largo plazo, los resultados no tardarán en llegar.
- Utiliza las escaleras en lugar del ascensor.
- Trata de no permanecer muchas horas sentado durante tu jornada laboral, da pequeños paseos, haz algunos ejercicios de peso corporal.
- Saca a pasear a tu mascota, juega con tus hijos, limpia y ordena tu hogar, lava el auto.
- Para tramos cortos no uses tu auto o el transporte público, caminar y montar tu bicicleta son opciones más económicas y saludables.
- No pases tanto tiempo mirando televisión o navegando en internet, busca otras actividades lúdicas que requieran que te muevas un poco.
- Disfruta de otros deportes, pero no a modo de entrenamiento sino por mero disfrute y entretenimiento.
Más allá de estos tips, haz todo lo que puedas para pasar la menor cantidad de tiempo sentado y más tiempo caminando. Una opción válida es adquirir un podómetro (dispositivo electrónico portátil que cuenta cada paso que una persona realiza) Un estudio publicado en el año 2006 en la American Journal of Health Promotion, expresa que sujetos sedentarios que se propusieron la meta de realizar 10.000 pasos diarios vieron grandes cambios y mejoras en su composición corporal.

Caso Llamativo
Un caso curioso de considerar es el de la cultura Amish, este grupo etnoreligioso se caracteriza por no haber adoptado gran parte de los avances tecnológicos de la sociedad moderna. Entre estos individuos la taza de obesidad es del 4%, extremadamente baja en comparación a la de países occidentales que rozan el 30%.
Además del tipo de alimentación otro factor que explica la gran diferencia en dichos valores es que dan alrededor de 15.000 pasos al día, mientras que los sujetos promedio 5000. Esto genera una diferencia de aproximadamente 400-600 calorías por día, una cifra que claramente da para pensar.