Amor, Pasión, Obsesión. Tan Cercanos y Tan Necesarios, en su Justa Medida
En este cierre de año de 2019, me pareció importante hablar sobre la delgada línea que separa el amor, la pasión y la obsesión, y es que con los propósitos que nos fijamos para el nuevo año, es fácil perdernos entre estas tres palabras.
Si bien lo que voy a compartir contigo ahora, abarca cualquier área de nuestras vidas, vamos a aterrizarlo al ejercicio y la dieta que son propósitos de año nuevo comunes en la lista de un gran número de personas.
Amor
El amor es la energía más grande en el mundo, y no lo digo yo, lo dice Albert Einstein y él sabe mucho sobre la energía. Yo por otro lado, no soy experta ni en el amor ni en la energía pero, puedo compartir contigo que AMO el ejercicio y lo sé por qué a mi no me cuesta ningún trabajo pensar que me levantaré cada mañana a las 4:30 am para hacer ejercicio.
Cuando es un amor así de grande, la gente no suele comprenderlo de todo y comienzas a ser el ojo del huracán, habrá quienes te admiren pero habrán muchos más que te critiquen. Ante esto simplemente quiero aconsejarte que hagas caso omiso a ambas posturas. Un exceso de admiración ajena puede convertirse en obsesión, en tanto que un exceso de críticas pueden acabar tu amor.
Del mismo modo que debes amar el ejercicio que realices, debes amar lo que comes y en realidad todo lo que haces. De nuevo poniéndome como ejemplo, debo decir que en cuanto a la dieta he tenido que realizar más esfuerzo para poder amar lo que como.
Y es que como tú, aunque sea nutrióloga, he caído en la parálisis por análisis, es decir, el exceso de información me ha frenado muchas veces en lograr amar mi dieta, tanto porque si no cuadran mis macronutrientes o calorías, cómo por qué el alimento es “insano”. Lo insano es comer con prejuicios y sin atención al acto.
Pasión
La pasión, personalmente la entiendo, como aquello que le da sentido y dirección a nuestra estancia en este mundo. Si bien el amor nos da una idea sobre ello, la pasión viene a ser la parte racional o en la cual materializamos ese amor.
Continuando con mi ejemplo, mi pasión es ser nutrióloga y ayudar a otras personas a tener una relación sana y nutritiva con la comida, siempre partiendo del respeto hacia las creencias de cada una de las personas que llegan a mi vida. Es decir, si su religión o una creencia no les permite comer determinado alimento, por más nutritivo que sea, es mi deber como ser humana empática respetar sus ideales y como nutrióloga cubrir sus necesidades nutricionales para garantizar la salud.
La pasión suele traer remuneración, es por ello que la miro como aquello que amas de manera materializada, que ojo, no sólo tiene que ser con dinero, puede ser con salud, con conocimiento, con compañía, etc.
Obsesión
Y llegamos con la prima fea de estas tres palabras, la obsesión. Un poco de todo está perfecto pero resulta que la obsesión es un tanto autodestructiva sino se tiene la cautela necesaria.
Es además muy sencillo caer en obsesiones gracias al amor o a las pasiones que están dirigiendo nuestras vida.
Según mis observaciones, es muy fácil pasar del amor a la obsesión, ya que algo que amas te hace por consecuencia, sentir bien y es ahí cuando caemos en el querer desear más y más. Ahora, si lo extrapolamos a la pasión y a ello le sumamos las comodidades que una pasión bien arraigada nos puede brindar (recuerda, dinero, salud, conocimiento, compañía), la obsesión también está a la orden del día.
La cuestión es siempre estar atentos, cuando tu amor o tu pasión te empiezan a desgastar de más, te estresan al borde del malestar físico y emocional, es momento de tomar distancia, descubrir nuevas pasiones y nuevo amores, darte un respiro para que una vez que retomes, vuelvas a disfrutar.
Siempre hay que navegar con atención, es como cuando estamos en el gimnasio, sino pusieras atención a las sensaciones de tus músculos podrías continuar hasta lesionarte, o con la dieta, sino ponemos atención a lo que comemos y cómo nos hace sentir, no podremos saber qué alimentos y que cantidades son mejores para nuestra salud.
Del mismo modo, nuestras metas en la vida y el sentido que le damos, debe estar siempre en constante evaluación, está bien y es normal estresarnos un poco de vez en cuando, al final del día, son las situaciones incómodas las que nos van forjando, pero vivir la vida en lamento eterno me parece que es desperdiciar la alegría y el don de estar vivos.
Creeme cuando te digo, no hay prisa, puedes correr tan rápido como quieras o ir tan lento como desees, de cualquier manera vas a llegar, quizá antes o quizá después pero el tiempo no es lo importante, sino que tanto te “despeinaste” en el camino, cuántas alegrías viviste, cuán fuerte latió tu corazón y cuánto de ello pudiste compartir con tus seres amados. ATENCIÓN.
Cuida tu Amor, tu Pasión y tus Obsesiones
Estás 3 palabras son parte de la vida, pero para que sea una vida de éxito, que trascienda, hay que tenerlas en las cantidades exactas:
El amor es la base por qué es la energía del universo, la pasión nos trae a nuestro planeta y la obsesión descontrolada puede hacernos perder en el más allá.
En Fit Fighters queremos enseñarte a tener estos 3 ingredientes de manera adecuada en tu vida, de tal manera que el Fitness sea una parte especial e importante para ti, como lo es para cada uno del equipo.