Emociones y Pandemia. ¿Me Estoy Volviendo Loco?
Ahora que estamos en casa, es inevitable estar en contacto con nuestras emociones, en la mayoría de los casos, las emociones que estamos presentando son emociones que calificamos como “ malas”, “negativas” o como a mi me gusta llamarlas, “de baja vibración”. Sentir miedo, angustia, ansiedad, estrés y hasta antojos es normal, tomando en cuenta la situación por la cual está pasando el mundo entero.
Así que, partiendo de esa naturalidad, en esta entrada, analizaremos con mayor profundidad, la raíz de estas emociones, el porqué de su presencia en nuestras vidas y ¿qué podemos hacer al respecto?.
¿Estamos Enloqueciendo?
En realidad, no, pero si te permites enloquecer, eso es lo que tendrás, no olvides por ningún momento que eres una persona creadora, lo cual parte tanto de creer como de crear, así que mucha atención en tus pensamientos.
Es mucho muy probable que ahora que no tenemos métodos de escape ante nuestro traumas y problemas, estemos constantemente colapsando ante nuestras sensaciones emocionales y físicas, es decir, ahora no hay terapia en el gym, análisis de problemas con los amigos de la oficina, ni reuniones con los amigos, todo lo cual, hasta hace unas semanas atrás eran nuestra manera de depurar estas emociones, pero ahora, literalmente no hay salida. Pero tranquilicemonos, no hay situación en la vida que se nos presente, la cual no podamos enfrentar y trascender.
Efecto Noticiero
A nuestras heridas del pasado, ahora hay que sumarle el miedo del presente ante el Covid-19, más la incertidumbre del futuro, mirando esto, es normal que las emociones que cité al inicio, vengan de visita constantemente a lo largo de estas eternas 24 horas. Personalmente creo que cualquier emoción que sintamos a flor de piel o bien, que sintamos que nos va a hacer estallar, es un buen momento para detenernos un momento y ahora que estamos solos en casa, hacernos responsables de ello, me parece que es una gran oportunidad para darnos cuenta de todo lo que podemos lograr con la simple intención de proponernos salir victoriosos, o bien si decides dejarte hundir, también será algo que realmente está en tus manos.
Este es un gran momento para poner orden a las heridas del pasado y comenzar a administrar las noticias que consumimos cada día, desde hace bastantes años tengo el hábito de evitar consumir noticias y periódicos pero aún con este hábito bastante fijo en mi vida, ante la pandemia por la cual atraviesa el mundo, parece casi imposible no obtener noticias alarmantes, casi caigo presa del morbo, de querer pasar mis 24 horas consumiendo noticias con respecto al Covid-19, pero me detuve cuando mis emociones me indicaron que esto no era sano.
¿En qué momento parar?, lo cierto es que cada persona tiene distintos grados de tolerancia, considero que la mía es bastante grande por ello es que me aventure a informarme sobre todo, sin embargo, al cabo de los días comencé a sentirme cansada, con antojos dulces y un tanto depresiva, todo ello me indicó claramente que estaba consumiendo demasiada información, demasiado Covid-19.
Ante ello organice mi día para mantenerme informada respecto al tema, pero sólo lo necesario, es decir, las medidas que se han implementado tanto en mi país como en otros países, información con respecto al virus, los cuidados, medidas, prevenciones y algo que sí me llama mucho es el número de casos tanto mundial como de determinadas naciones. Pero OJO, no sólo es consumir información, también hay que ANALIZAR y CUESTIONAR, para entonces sí, formar un criterio y tomar acciones personales.
El Miedo ¿Es Para los Débiles?
El miedo es una emoción que me parece bastante noble, a partir del miedo el cuerpo y la mente, nos protegen de posibles riesgos, sin embargo, si alimentamos ese miedo, podemos crear un gran monstruo que se alimenta a base de nuestra energía y además nos paraliza.
Tener miedo no sólo está bien, además es normal, todos los seres vivos sentimos miedo, pero está dentro de la capacidad humana, evaluar hasta qué punto ese miedo me está protegiendo y hasta qué punto comienza a limitarme y debilitarme.
Como acabo de mencionar, el miedo es una emoción que se alimenta de nuestra energía, no es ninguna sorpresa que al estar alimentando nuestros miedos, al final del día o los días, experimentamos una enorme fatiga, es por ello que, es de suma importancia que al primer síntoma de miedo, tomemos acción, recuerda, analiza y actúa:
Okay, hay un virus, ¿cuál es el riesgo de contagio?, ¿cuáles son las medidas que debo tomar?, ¿cómo me debo preparar?. Hacerte estas preguntas te darán herramientas para poder continuar con tu vida aunque el coronavirus siga creciendo.
¿Qué Hacer Cuándo los Miedos Son Más Grandes Que Uno Mismo?
Es probable que si has pasado muchos días o semanas alimentando tus miedos, ahora creas que son más grandes que tú, además, como mencioné, hacerlos crecer, es debilitarnos a nosotros mismos, ante ello surge la sensación de que nuestros miedos son más grandes y fuertes que nosotros, con ello, las preguntas que acabo de plantear quizá no logren brindarnos la luz necesaria para iluminar ese túnel al cual hemos ingresado.
Cuando esto ocurre, lo mejor es buscar ayuda, idealmente con un psicólogo pero los amigos y familiares también pueden ayudarnos. Hoy en día contamos con la tecnología de nuestro lado, de tal manera que si estás pasando por un momento de soledad realmente es muy sencillo conectar con alguien, además con la pandemia están surgiendo muchos psicólogos que están dando apoyo gratuito vía online.
Por nuestra parte, el equipo de Fit Fighters, seguimos apoyando a nuestros alumnos en lo que siempre hemos creído, nutrición y entrenamiento, además contamos siempre con una red de apoyo a través de nuestros grupos de facebook, videollamadas con todo el equipo, mensajería vía whatsapp, clases virtuales y estas entradas en el blog, donde cada día estamos subiendo información que consideramos puede brindar ayuda necesaria.
Ser fitness no es sólo comer pollo y hacer sentadillas cada día, ser fitness es todo un estilo de vida que siempre tomará en cuenta el contexto y las emociones que puedan presentarse de manera colectiva y personal y entre todos, ayudarnos a pasar la vida de una manera más agradable, acompañada de pollo y otros alimentos, de sentadillas y otros ejercicios, buscamos mentes sanas en cuerpos sanos.