¿Por Qué Rompemos La Dieta?

¿Cuánto tiempo tardaste en romper tu dieta la última vez?, hay quienes logran mantener su plan de nutrición durante mucho tiempo y quienes rápidamente abandonan su dieta, esto es debido generalmente a varios factores de los cuales hablaré en este artículo para que evites estos errores.

El mayor de los problemas al que nos enfrentamos al romper la dieta, no es como tal haber roto la dieta o perder nuestros objetivos o ganancias, lo peor que nos sucede ante este frecuente evento es el sentimiento o los sentimientos que pueden generarse dentro de nosotros.

Pensar que no somos lo suficientemente fuertes, que no nos queremos lo suficiente, que somos un fracaso pues dieta tras dieta nos es imposible llevarla a cabo. Tener estos pensamientos pueden afectar gravemente nuestra salud emocional.

Es por ello que en esta entrada veremos la manera de la cual debemos partir para evitar caer en constantes rupturas dentro de nuestros planes de alimentación.

Me encantaría decirte que en el campo de la nutrición las cosas son tan sencillas como resolver la tabla del dos, sin embargo, a la hora de alimentarnos no solo nos enfrentamos a toda la educación nutricional que pueda aportarnos la ciencia, el nutricionista, el entrenador, la amiga o la vecina, también entran en juego nuestras propias creencias y relación con la comida, nuestros gustos, preferencias, tolerancias y hasta el presupuesto que tenemos destinado a nuestra alimentación.

Con lo anterior, no quiero meterte miedo y la creencia de que hacer dieta es la cosa más complicada del mundo, tal parecería que hacer dieta requiere que tengamos primero un doctorado en nutrición, otro en deporte y otro en anatomía y fisiología, nada de ello. Sin embargo sí es importante que tengamos una buena red de apoyo que se comuniquen entre sí para poder tener un plan exitoso, es decir, nutricionista, familia, médico y entrenador físico si es que cuentas con él.

El principal error que cometemos a la hora de empezar una dieta es que tanto el paciente como el nutricionista tienen prisa por ver resultados. En primer lugar el paciente quién quiere lucir como modelo fitness para el día de ayer y el nutricionista muchas veces tanto para demostrar que sus dietas son efectivas, mismo que dará fama y por tal mayor flujo de pacientes.

Sin duda alguna, hay muchas técnicas dentro del campo de la nutrición para lograr un cambio rápido en las personas pero estos cambios tan veloces suelen hacer pasar un mal rato además de poder poner en riesgo la salud del paciente a corto o largo plazo.

Hacer dieta más que ser algo que tiene fin una vez alcanzado el objetivo fijado, debe ser en sí un cambio de hábitos que nos ayuden a tener cambios graduales y sostenibles, mismos que nuestro cuerpo aceptará gustoso, evitando creer que está pasando algo grave de lo cual hay que protegerse.

Cómo mencionaba al inicio y como suelo decirle a pacientes y alumnos de Fit Fighters, la dieta es como ir al sastre a que nos haga un traje a la medida, tú eres quién debe fijar las bases de tu dieta y el nutriólogo es quien debe guiarte sobre la manera adecuada y correcta que deberás alimentarte, partiendo de las bases que has fijado y claro, haciendo correcciones si es que deben hacerse.

Es sumamente importante que comprendas y te enteres que ES LA DIETA QUIÉN DEBE AJUSTARSE A TI Y NO TU A ELLA. Además de que no todos somos iguales, tampoco todos partimos del mismo punto de partida ni tenemos las mismas capacidades, esto también debe valorarse en consulta. Quizá un paciente es muy capaz de cortar de tajo su consumo de refresco, mientras que otra persona deberá hacerlo paulatinamente. Ambos casos son correctos, lo importante es ir sembrando hábitos que sean permanentes en el tiempo y que estos mismos nos dirijan hacia la salud y nuestras metas.

Todo debe ir con medida, no porque tengamos la información anterior, debemos pedir que nuestra dieta está basada en alimentos que en abuso son perjudiciales para nuestra salud, una hamburguesa bien calculada y hecha en casa es mucho mejor opción que una dieta de alguna cadena de comida rápida, sin duda alguna, la casera tendrá mejores ingredientes que la que podamos comprar en la plaza comercial.

Esto no significa que de manera ocasional puedas consumir esa hamburguesa comercial que seamos realistas, tiene lo suyo, por algo son tan populares y tienen tanto éxito. Pero ojo, entre mayor cantidad de nutrientes aporte tu dieta, menor será la frecuencia de antojos de todo tipo, gracias a que estás bien nutrido.

Esta razón va aunada a la razón anterior. Es muy frecuente que una vez que hemos decidido cambiar nuestra manera de alimentarnos, de inmediato empecemos a ver con malos ojos a determinados alimentos. Ante ello mi postura como nutrióloga y como humana, es que esto es algo errado, si por las razones extrañas del universo hoy en día hay todo tipo de alimentos y sobre todo a ti te agradan, no hay porqué hacernos la vida de cuadritos, acude con tu nutricionista para que te guíe de qué manera, cómo y cuándo podemos comer esos alimentos.

Estos descansos, ajustes o gustos podemos hacerlos de manera semanal, quincenal, mensual o cada que logremos alcanzar un objetivo y OJO, esto no es “premiarnos como perros”, expresión que alguna vez escuché en un influencer, es simplemente disfrutar de la vida lo cual también incluye la alimentación.

Todas estas verdades pueden ayudarte a mejorar tu salud, tu composición física y sobre todo a llevar una buena relación con la comida y con esta idea de “estar a dieta”, que POR FAVOR DIFUNDE: estar a dieta no es estar pagando ninguna condena.