¿Por qué Subimos De Peso?

El sobrepeso y la obesidad son en la actualidad el o los problemas más grandes de salud a la que nos estamos enfrentando a nivel mundial, y es que tener un exceso de peso a expensas de grasa corporal no sólo no es estético conforme a los estándares actuales de belleza, lejos de ello, esta condición trae consigo muchos problemas de salud y socioculturales, es decir, una vez afectada tu salud, afectamos tanto el entorno familiar como el laboral.

Pero ¿Qué ocasiona ese aumento de peso? y ¿Por qué actualmente esta condición física está tan aumentada?, de ello hablaré en esta entrada con la finalidad de poner manos a la obra, hacer un cambio radical en nuestros hábitos diarios es primordial, si no sabes cómo lograrlo, en Fit Fighters, te guiamos con toda la alegría del mundo.

Con la preocupación por el aumento de peso en la población, tanto las personas comunes, como las personas que están en dentro del cuidado de la salud, comenzamos una búsqueda desmedida por saber qué alimento o alimentos están contribuyendo a este deterioro de la salud.

A raíz de ello han salido un sin fin de dietas en donde alimentos con gran contenido nutricional han sido muy mal calificados y ello simplemente ha sembrado miedo desmedido a los alimentos. Que si los carbohidratos se transforman en grasa o que las grasas se guardan en forma de grasa y que si las proteínas nos dañan los riñones, ante ello sin duda un pan con café si bien igual nos mata, al menos nos hace feliz momentáneamente.

Ninguno de estos macronutrientes están aquí para dañar tu salud, aumentarte de peso o fulminar tus riñones, simplemente están aquí para promover la salud y aportar energía, y debemos consumirlos en su justa medida. No es que uno por sí solo genere un aumento de peso, es un consumo desmedido de cualquiera de ellos.

Y curiosamente, cuando eliminamos un grupo de alimento y con ello generamos ansiedad por ese grupo de alimentos que hemos eliminado, una manera muy común es abusar de los alimentos que sí son permitidos y ojo aquí, aunque forme parte de tu dieta, si estás comiendo de más, subirás de peso evidentemente y con justa razón.

El caso de la malnutrición es un cuadro peor que en el caso anterior. La malnutrición está dada por un consumo de comida baja en nutrientes, cuando no damos a nuestro cuerpo tanto los macros, como los micronutrientes e incluso la cantidad de agua que requiere, vamos a experimentar sensación de hambre constantemente, a pesar de haber comido ya cereales azucarados, galletas, jugos y refrescos.

Además este tipo de alimentos tienen la característica de ser extremadamente sabrosos o hiperpalatables, de tal manera que no podemos comer solo una y necesitamos atiborrarnos de estos productos constantemente. Llevando una dieta con alimentos ultraprocesados es sumamente fácil consumir muchas más calorías de las que gastamos incluso siendo atletas de élite.

Frecuentemente cuando enviamos un plan de alimentación, pacientes y alumnos comentan que no pueden comer tanta comida, esto es porque los alimentos que enviamos son realmente saciantes, llenos además de fibra y agua, lo cual brinda mucha saciedad pero si llevamos una dieta azucarada y grasosa, el cambio resulta complicado más no imposible.

A medida que hemos avanzado hacia un mundo más cómodo y seguro, hemos sacrificado en gran medida nuestra movilidad, diría yo hasta el extremo ahora que con Netflix, no tenemos que levantarnos a cambiar un cassette o un DVD, están las 12 temporadas de nuestra serie y además se reproducen en automático capítulo tras capítulo hasta que se preocupa por nosotros y nos pregunta ¿Sigues ahí?, esto me da la sensación que a veces nuestras pantallas inteligentes si tienen más inteligencia que nosotros, como si supieran que no es bueno para nosotros estar tanto tiempo sentados.

Tanta comodidad ha generado la creencia que tener masa muscular es propia de hombres y mujeres vanidosos con baja autoestima que buscan encontrar confort tras un cuerpo definido, que seguro habrá casos así pero lo cierto es que, independientemente de tener o no problemas emocionales, la especie humana se había caracterizado por tener una composición corporal con elevada masa muscular y no precisamente por problemas emocionales, sino debido al ritmo de vida que llevábamos.

Me parece curioso que, en el pasado, la gente tuviera buena composición corporal pero morían jóvenes a causa de enfermedades bacterianas o accidentes derivadas de un mundo más hostil y en nuestra actualidad donde estas situaciones no son propias de nuestra realidad gracias a un mundo más seguro, estemos muriendo a causa de una mala composición corporal.

Dicen que el estrés es la enfermedad de nuestra época, aquí también me hace mucho ruido que siendo este un mundo más seguro, más limpio, con mayor capacidad de producir y consumir alimento, nuestras mentes vivan en un estrés constante.

En el pasado, el estrés se vivía a causa de encontrarte con un león en pleno paseo matutino, el cuerpo ponía en marcha las hormonas del estrés la cuales te permiten actuar con destreza, agilidad y salir vivo de tal evento, literalmente, el estrés salía de nuestro sistema con esa rutina mortal. En nuestra era, el estrés jamás es liberado, debido a todos los problemas que decidimos llevar con nosotros y sin salida de escape al ser sedentarios.

En este sentido, el gimnasio de verdad un sitio donde podemos ir a liberar ese estrés que de no ser así, afecta nuestra composición corporal y nuestra salud. Y sin duda, después de una buena rutina de ejercicio, nuestra mente estando más despejada puede dar mejor solución a todos esos problemas que si ponemos atención tampoco son tan graves, personalmente, me gusta verlos como un sazón que se le da a la vida.

Y para finalizar este artículo e irme a descansar, hablaré de la falta de sueño que también caracteriza a nuestra población actual, muchas veces derivado también de ese exceso mental que vamos cargando.

Es curioso que el no dar el descanso adecuado a la mente y al cuerpo hace que durante el día estemos con pila baja o en modo avión, pero una vez que por fin ha llegado la noche y estamos en cama, no podemos conciliar el sueño.

Ese momento de la cama suele ser algo como dar giros y giros en la cama hasta que por fin cerramos los ojos y sentimos que apenas han pasado 5 minutos cuando ya ha sonado la alarma… Ante un cuadro así, evidentemente en lo menos que pensamos es en que momento iremos a entrenar, sin embargo entrenar te llena de energía, como ya mencioné despeja tu mente y finalmente te cansa tanto que caes como bebé.

Dormir es sumamente importante a la hora de perder peso ya que, andar con la pila baja durante días será interpretado por nuestro cuerpo como necesidad de energía y nuestro cuerpo sabe bien que con luz no hay descanso y que la energía más rápida de conseguir está en lo dulce, de tal manera que querrás si o si tu pan con azúcar y un pan dulce, llevándonos hacia ese exceso calórico y malnutrición lo cual no nos motivará a ir a entrenar ni aunque la vida dependa de ello.

Si tu vida hace clic con cada una de estas situaciones que acabo de describir, no intentes hacer un cambio radical, ve gradualmente, corrige poco a poco cada detalle, basta con dar un primer paso para que el resto ocurra como cascada.