Sustituye Inteligentemente Los Alimentos Ultraprocesados para Niños
Los niños son responsabilidad de los adultos, es por ello que debemos estar informados sobre la manera correcta de alimentarlos para garantizar su salud, esto a su vez, va a repercutir en la salud durante su vida adulta.
En el mercado existe una enorme variedad de alimentos dirigidos al publico infantil, desafortunadamente, la gran mayoría de estos pseudoalimentos están cargados de energía en forma de grasa y azúcar, además de un sinfín de aditivos poco seguros para el consumo de un niño. Lo anterior sin duda compromete enormemente la salud de nuestros niños que finalmente podrán ser adultos enfermos.
Leches Saborizadas
Todos tenemos el conocimiento de que los niños más que nadie, necesitan un consumo diario y quizás elevado de leche para que los huesos “crezcan” y tengamos adultos tan altos como las estrellas de Hollywood. En realidad la estatura está pre definida por los genes, llegar o no a la altura máxima dependerá del total de la dieta y no únicamente del consumo o no de la leche.
Si tu hijo tiene preferencia por bebidas tipo licuados, ofrece licuados a base de leche entera o vegetal, endulza con dátiles o plátanos maduros y fresas o cacao o nueces. Este es una lechita saborizada con alto valor nutricional.
Azúcar Líquida
No hay manera más sencilla de llenar de azúcar a nuestros niños que en forma de bebidas, más aún que la leche pues esta, al contener proteínas y grasa dan sensación de pesadez estomacal, sin embargo el agua es menos densa pudiendo consumir más cantidad y por tal más azúcar.
Una manera divertida de hidratar a los pequeños de la casa (y también a nosotros mismos) es infusionar distintos alimentos como limón, naranjas, fresas, menta, canela, etc; estas preparaciones las puedes hervir o dejar durante toda la noche en el refrigerardor. Al final pueden consumir los alimentos que infusionaste, esto aportará hidratación, vitaminas y fibra, brindando sabor y saciedad y no sólo energía (azúcar) que de no utilizarse se almacenará en forma de grasa.
Barritas de Cereales
Unos snacks típicos en las loncheras de los niños en edad escolar, son las barritas de cereales, estos productos están cargados de azúcar y grasa, ambos de baja calidad y 0 gramos de fibra.
Una opción llena de nutrientes son las galletas de arroz o quinoa o maíz (hay mucha variedad), a las cuales les puedes untar una crema de semillas como almendras, nuez de la india o cacahuate y la fruta que más le guste a tu pequeño. La carga de azúcar y grasa de esta versión son de calidad, además de contener la fibra de los cereales y las frutas, lo cual brindará saciedad, contrario a las barritas del mercado que sólo generarán altas y bajas de energía gracias al contenido libre de azúcar.
Yogures
Hoy es muy común escuchar que necesitamos una flora intestinal saludable y que los alimentos como el yogurt ayudan a lograr esta meta, no por nada nos dicen que traen lactobacilus vivos y demás bacterias buenas. Esto sin duda es cierto, sin embargo, debes saber que el azúcar que contienen estos productos alimentan a las bacterias malas, y si estás predominan en los intestinos (que es el caso de la gran mayoría) de nada servirán esas bacterias buenas, las malas ganarán la batalla.
Es por ello que en Fit Fighters sugerimos que evites los yogures cargados de azúcar que encuentras en el supermercado y prefieras preparaciones caseras, como las que te presento en la imagen.
Quesito Petit Suisse
El famoso danonino para que nuestros niños crezcan alto y con huesos fuertes, aporta en realidad bastante energía y azúcar a la dieta de los pequeños, más que ser un producto que nos ayude a tener salud ahora o en la vida adulta, es una golosina que como tal, hay que moderar y no seguir la recomendación de uno al día para esos supuestos huesos fuertes.
En sustitución de ello es mejor optar por un queso real y fresco, alto en fibras como un queso cottage que es menos ácido que un yogurt, a este producto ademas puedes agregarle frutillas o zarzamoras para darle un toque dulce además de igual el color del danonino, pero totalmente libre de colorantes artificiales. Esta versión si ofrece crecimiento y huesos fuertes.
Conclusiones
La realidad es que los niños no necesitan alimentos especiales para ellos, requieren los mismos alimentos y nutrientes que tú pero en diferente proporción. Busca siempre la manera de darle una versión casera de los productos que puedas hallar en el mercado.
No fomentes tampoco la repulsión contra los alimentos altos en calorías, grasas y azúcares, explica las razones por las cuales es mejor llevar una alimentación con alimentos frescos, llenos de nutrientes que le darán salud, bienestar y energía; y si ambos así lo deciden, permite que de manera ocasional consuma alimentos que ofrece la industria.
La dosis hace el veneno y causa el mismo daño que a diario consuma estos alimentos como que también crezca con la idea de que algunos alimentos son malos, esto puede despertar en él una obsesión por una comida “sana”, denominado ORTOREXIA o el caso opuesto, una compulsión por consumir esos alimentos que le fueron prohibidos.