Ventajas Fitness de la Cuarentena

Siempre es importante enfocar la mente en las cosas positivas que SIEMPRE están ocurriendo a nuestro alrededor, más aún cuando atravesamos por una etapa de crisis como es actualmente la pandemia por el covid-19.

Haciendo un poco de trabajo interno con respecto a esta situación, halle mis propias ventajas fitness de estar en casa y quiero compartirlas contigo para que te ayuden a pasar estos tiempos difíciles, por si sigues enganchado o enganchada con la orden de cerrar gimnasios.

Obviamente tenía que arrancar las ventajas del fitness en cuarentena, hablando del gimnasio ya que somos Fit Fighters pero también porque personalmente el gimnasio era mi única actividad fuera de casa, ahí no sólo como muchas personas iba a “terapia”, también era el sitio donde tenía contacto con otros seres humanos, ajenos a mi familia. De tal manera que, el hecho de que lo cerrarán, fue un golpe a varias áreas de mi vida.

Una vez que acepte el hecho de que el gimnasio estaria cerrado por tiempo indefinido me dispuse a buscar un lugar en mi casa que fuese mi nuevo espacio sagrado, evidentemente con menos equipo pero no por ello menos retador. Otra de las grandes ventajas es que literalmente el gimnasio está sumamente cerca de mi cama, trabajo y el baño, esto me ha dado una infinidad de tiempo libre y me ha hecho cuestionar si vale la pena ir al gimnasio, esto sin duda ya era un pensamiento extremista.

Ahora que estamos en casa, es en la mayoría de los casos mucho más sencillo tener control de nuestra alimentación, sobre todo para aquellas personas que viven solas o que están dentro de un ambiente saludable en cuanto a la dieta que se lleva en casa.

En caso contrario, es decir, que las personas con las que compartimos el techo, no sean precisamente los más cuidadosos en cuanto a su alimentación, llevar la alimentación puede ser un poco más complicado pero no imposible. Personalmente había estado muy obsesiva con la alimentación, ahora que estoy en casa me ha permitido relajarme en este aspecto SIN dejar de lado la salud, ahora disfruto mucho más los alimentos y soy mucho más consciente en su consumo.

Ahora todos somos ricos ya que como dice el dicho: el tiempo es dinero, y lo que más tenemos ahora es tiempo, dependerá de cada uno de nosotros sacarle jugo a cada segundo del reloj o mal gastarlo como dinero extra. Sea cual sea la manera en que usamos nuestro tiempo es válida, siempre que lo que estemos haciendo este contribuyendo a ser una versión más óptima de nosotros mismos.

Y ojo aquí, dentro de lo anterior, también entra el tiempo que invertimos en la recreación, esto lo menciono porque ahora más que nunca se nos está imponiendo la idea de que debemos ser ultra productivos cada minuto del día, aprovechar cada segundo en “hacer algo”, pero MOMENTO, ninguna máquina logra funcionar 24/7, el descanso es IMPORTANTÍSIMO, de tal manera que ese tiempo de descanso claro que ayuda para ser esa versión que buscamos, no te sientas mal por descansar.

Volviendo a la época de gimnasio abierto, una de nuestras más grandes incomodidades era el tener que “soportar” a los demás usuarios, porque admitamoslo, todos queríamos el gimnasio para nosotros solos y voalá, tanto lo deseamos que hoy así es, no precisamente como lo imaginamos, sino más bien en una situación más austera, pero vamos, nadie llega a pedirte que alternen el garrafón de agua.

Oh qué tal aquellos sujetos que tenían el don de la máxima sudoración pero la poca consideración de limpiar el equipo, YA NO MÁS DE ELLOS, ahora sólo eres tú con tu propio sudor, en lo personal, esto me ha ayudado a tener que limpiar a diario si o si y siempre es agradable estar en un lugar que rechine de limpio.

Esta palabra se ha puesto muy de moda a últimas fechas, al menos, en mi mundo y desde que la aprendí, me encantó su significado. He leído múltiples definiciones, unas más científicas que otras pero mis favoritas son las definiciones un tanto poéticas:

Enfocarnos en lo bueno de los hechos y fluir con ello, de eso se trata la vida, ojo no tienes porque actuar con madurez en todo momento, se vale hacer berriche si así lo sientes internamente, pero no se vale quedarnos a vivir en él.