Una práctica común de los malos entrenadores es abusar de los suplementos alimenticios y de los anabólicos. Cuando empiezas a hacer ejercicio y vienes de un mundo sedentario, tu cuerpo tiene un déficit de salud. ¿Que es esto? Además de una pésima condición tu porcentaje de grasa es elevado y tienes deficiencia de masa muscular.
En mi experiencia como entrenador lo único que se necesita cambiar para que mis clientes empiecen a ver cambios es la alimentación y comenzar a hacer ejercicio moderado. La alimentación no es nada especifico todavía, con quitar refrescos, aguas azucaradas, bebidas energéticas, comida frita, comida chatarra, es mas que suficiente.
Igualmente el ejercicio consiste en trabajar 2 o 3 sesiones por semana de ejercicios y técnica general (ejercicios que trabajen todo el cuerpo sin dividir grupos musculares y asegurarme que esos ejercicios base se empiecen a dominar) y empezar a enseñarlos a hacer trabajo cardiovascular los días que no nos vemos (depende de la condición he historia médica, pero 20 minutos de caminar, trotar o intervalos es lo mejor para empezar). En resumen, empiezo a despertar un muy aletargado metabolismo.
Esto, créanme es suficiente para iniciar. Ahora, ¿que pasa cuando tu “entrenador” por ganar unos pesos extras, te vende el pack completo de multivitaminicos, quemadores, proteína y si quieres estar “Mamey” anabólicos?
Alguna de estas cosas te puede pasar o un conjunto de ellas.
1. Tu cuerpo va a aprender que la única manera de reaccionar es con sustancias exógenas, o que no pertenecen a tu cuerpo. Tu metabolismo aunque ya no va a seguir “apagado” va a aprender a funcionar de una manera que no es la natural. ¿Resultado? En 2 meses vas a experimentar tu primer estancamiento. ¿Solución de tu entrenador estrella? Subir la dosis o cambiar a un producto más efectivo y obviamente más caro.
2. No va a pasar nada, sobre todo si lo que quieres es bajar de peso, al contrario vas a aumentar de peso. La proteína no es mágica, al igual que cualquier exceso de calorías tu cuerpo va a reaccionar almacenando el excedente como grasa, a parte que vas a forzar a tus riñones e hígado a trabajar “un poco mas.”
3. No vas a saber tu verdadero potencial. Nunca sabrás si los cambios que estás obteniendo se deben a un buen trabajo físico y alimentación adecuada o a la magia del suplemento. Es por eso que por otro lado, los malos entrenadores te insisten tanto en empezar a suplementarte sin conocer ni preguntar siquiera tus hábitos alimenticios o tus metas. Aunque sean malos y sus programas de entrenamiento sean basura, tienen más probabilidades que tu veas un cambio y pienses que se debe a sus conocimientos.
Ojo, no estoy satanizando los suplementos, yo los he usado y me han ayudado, solo estoy diciendo que para que sacarle todo el provecho a la inversión, deben saberse usar, y una persona que empieza, e inclusive una persona con experiencia no los necesita si tiene un buen plan alimenticio y asesoría de un buen entrenador.
Hacer ejercicio es un cambio que hará que tu vida sea más productiva, sea mas integral. Como todas las cosas que valen la pena es algo que te costará trabajo y esfuerzo y que necesitará tiempo para madurar. No quieras saltarte pasos por obtener resultados que te aseguro, serán efímeros.