¿Quieres saber si estás logrando tus objetivos? Mide tu porcentaje de grasa.
Es muy importante que las personas que hacemos ejercicio llevemos un registro de nuestros avances. Esto nos ayuda a saber si lo que estamos haciendo en el gimnasio está rindiendo frutos.
Hay muchas mediciones que podemos usar como parámetros de nuestro avance, pero uno de los más importantes es la medición del porcentaje de grasa.
Es importante conocer tu porcentaje de grasa, ya que te permite saber si el peso que has ganado o perdido, es de grasa o de masa muscular. Cabe aclarar que otro parámetro que se modifica constantemente es la cantidad de líquidos retenidos y esto hace que muchas veces juzguemos erróneamente los resultados que obtenemos. Me explico:
Las variables que constantemente se están modificando en tu cuerpo son la grasa, el músculo y el agua. El músculo y la grasa, se mueven lentamente, es decir, no puedes ganar 500 gramos de músculo ni perder 500 gramos de grasa de un día a otro. Sigo viendo personas en el gimnasio que al iniciar el entrenamiento, sobre todo el cardiovascular, se pesan y al terminar lo vuelven a hacer. Así hayas pedaleado 2 horas en bicicleta, tendrías que haber gastado 4500 calorías para perder medio kilo de grasa, y esto tomando en cuenta que el 100% de las calorías provinieran de la grasa, lo cual no es cierto. Así que si perdiste 500 gramos de peso después de dos horas de hacer spinning, lo que perdiste en su mayoría fueron líquidos. De la misma forma, así hayas roto récord en tu sentadilla, el músculo necesita tiempo para poder reconstruirse, así que no puedes aumentar de músculo en un solo día de entrenamiento pesado. Si te pesaste en la mañana y en la noche ya habías ganado 2 kg de peso, el peso extra no proviene de tus bíceps, proviene principalmente de la retención de líquidos diaria. (Más si te suplementas con algunos productos como creatina).
¿Cómo se entonces si lo que perdí fue grasa o lo que gané fue músculo?
Ahí es donde entra la medición del porcentaje de grasa. Hay 3 métodos principales para hacerlo:
A) Por desplazamiento de líquidos.
Este método es muy profesional y el más exacto, solo que es costoso y hay pocos lugares donde lo practican. (La UNAM tiene uno). Se basa en la teoría del desplazamiento hidráulico donde sumergen tu cuerpo en un tanque con agua y hacen cálculos de acuerdo al agua que tiraste o desplazaste cuando te sumergieron. No es un método práctico, así que sólo lo menciono para que lo conozcas. Hay otro método llamado DEXA donde se miden parámetros corporales como la densidad mineral ósea, la grasa, la masa muscular, etc, y es mediante el uso de tecnología sofisticada, pero es un equipamiento propio de un hospital y pocos están al alcance de ello.
B) Por Bioimpedancia.
Éste método es el más común pues es muy práctico, pero también es el que más dolores de cabeza da pues es muy inexacto.
Ni los entrenadores, ni los nutriólogos deberían usarlo con gente que hace ejercicio, ya que el porcentaje de error crece.
Son las clásicas básculas o aparatos que sujetas con las manos, donde te arroja tu porcentaje de grasa. Su funcionamiento se basa en generar una corriente eléctrica y transmitirla de un punto a otro siendo tu cuerpo el que conduce esa corriente y cierra el circuito. El agua conduce mejor la electricidad que la grasa, así que si tienes poca grasa, la corriente se conduce más fácil y si tienes más grasa tu cuerpo conduce la corriente con más dificultad. Es tan inexacto este método que nunca arroja el mismo resultado después de 2 mediciones. De hecho, si no me crees, realiza el siguiente experimento. Toma tu porcentaje de grasa y después bebe un litro de agua para que veas el cambio tan significativo en el resultado.
Otro dato importante de este equipo es que no todos son iguales. Algunos son manuales, algunos son tipo báscula y hay algunos donde mezclan pies y manos. De estos 3 modelos el más exacto es el que usa las 4 extremidades para medir. Esto se debe a que la electricidad siempre busca el camino más corto para desplazarse, así que si usas el aparato manual, el circuito se cerrará midiendo en su mayoría la grasa visceral ya que es la zona por la que viajará la electricidad. Si eres mujer que acumula grasa en la cadera y no en el abdomen, tu porcentaje de grasa medido con este aparato será muy bajo. Si por otro lado usas el tipo báscula, la electricidad viajara a travez de tus piernas y la grasa que tomará como medida principal será la de la zona de las caderas, así que si eres hombre y te mides con este aparato, de la misma forma tu grasa será calificada como baja. Es por ello que si tienes que elegir alguno de estos modelos, elijas el que usa manos y pies ya que la electricidad viaja por una superficie mayor que en ambos puntos anteriores y considera así más parámetros.
C) Plicometría:
La plicometría es el método que todo entrenador y nutriólogo debería de usar para medir el porcentaje de grasa en personas que hacen ejercicio ya que es bastante exacto.
Es un aparato que mide los pliegues en ciertas partes de tu cuerpo. Con una mano pellizcas el pliegue y con el aparato mides el espesor del pliegue. Ya con los datos de distintos pliegues de tu cuerpo se meten en unas fórmulas pre establecidas que te arrojan el resultado de tu porcentaje de grasa.
Es un método muy exacto siempre y cuando sepas usar bien el aparato ya que tienes que saber pellizcar los pliegues para que las medidas sean verídicas. Otro punto importante es que en el mercado se venden distintos tipos de plicómetros que varían mucho en calidad. Los he visto de plástico y muy baratos, pero este tipo de material se deforma con el tiempo y el resorte, esencial para las mediciones, pierde dureza. Así que si eres entrenador y vas a invertir en uno de estos aparatos (Deberías considerarlo si eres un entrenador profesional) te recomiendo el modelo Lange. Otro que no es tan caro y que también es de buena calidad es el BODY CALIPER.
Hay una certificación internacional especializada en estandarizar el procedimiento de esta medición junto con otras medidas antropométricas. ISAK. Te recomiendo ampliamente que busques la manera de tomarla.
Yo siempre digo que lo que no se mide no se puede mejorar. Ya seas entrenador, nutriólogo o alguien que está luchando por alcanzar su meta física, debes de utilizar la mayor cantidad de herramientas para conseguir el éxito y esta es una de ellas. Sinceramente yo no confío en un entrenador o nutriólogo que mide a sus clientes deportistas con bioimpedancia, porque aunque sea una tecnología que apantalla más que el plicómetro, para mí, pone en evidencia un profundo desconocimiento del comportamiento del cuerpo del deportista.
Si eres deportista y no encuentras a alguien que te tome la plicometría, usa una cinta métrica. No es lo ideal pero créeme que te dará una perspectiva más clara de lo que esta pasando en tu cuerpo que una bioimpedancia.