¿Tienes Problemas Para Construir un Cuerpo en Forma y Saludable? Tienes que hacer esto.
¿Sientes como si fuera una batalla constante para comer bien y hacer ejercicio de forma consistente, o tienes problemas para construir un cuerpo en forma y saludable? Si hubiera un arma secreta para ayudarte a lograr resultados, es esta.
Antes de examinar esta “arma secreta” primero veamos el enfoque que la mayoría de las personas tienen para perder grasa, ponerse en forma o simplemente para mejorar su salud. Adoptan el enfoque de todo o nada hacia la salud y el fitness.
La mayoría de las personas cambian entre los 2 extremos. Lo hacen “todo” perfecto (siguen su dieta sin fallar, hacen todos sus ejercicios, etc.) o no hacen “nada” en absoluto (comen mal, se saltan sus entrenamientos).
El enfoque de todo o nada simplemente está mal – es peligroso. “Todo” puede llevar a una obsesión (comer en exceso, desarrollar malos hábitos alimenticios, usar el ejercicio como castigo, etc.), vergüenza y culpa (de no poder sostener una metodología tan rígida) y claro, insatisfacción de nunca poder alcanzar las metas propias. “Nada” es cuando no haces ni una sola cosa; no te ejercitas regularmente o consistentemente escoges comida no saludable. Ya que no haces el plan “a la perfección” decides no hacer nada.
Cómo el enfoque de Todo o Nada lleva al fracaso
Examinemos el “todo” más a fondo. Esto es cuando estás muy motivado y comprometido a “finalmente” alcanzar tus metas. Haces todos tus entrenamientos. Comes lo que debes. No te desvías de las comidas permitidas y te rehúsas a comer las que no debes. Lo haces todo.
¿Pero qué pasa cuando tu hijo tiene una actividad de último minuto que hace que pierdas tu entrenamiento? ¿Qué pasa si te enfermas y te tienes que perder un entrenamiento o dos o tres? Esto te descarrila, y tu impulso y motivación se hunden. Esos dos o tres entrenamientos que te perdiste se convierten en un mes de entrenamientos que pierdes. Ahora no haces nada.
O tal vez un evento especial cae en medio de tu nueva dieta y plan de entrenamiento. Vas a estar rodeado de montañas de cosas ricas que tu dieta prohíbe. Pero no hay problema, porque estás motivado. Vas a resistir el aroma de tus comidas y postres favoritos porque estas tomándote tu plan de entrenamiento en serio.
Entonces llegas. Eres resistente al principio, pero luego vez una creación de helado que nunca antes habías visto. “¡Al diablo!” declaras mientras pones tus manos sobre el frío y delicioso postre de los dioses.
Unos minutos después estás comiendo otras cosas que habías jurado evadir. Ya lo arruinaste y rompiste tu dieta mientras descubrías cuántas mordidas necesitabas para alcanzar las Oreos en ese sándwich de helado, así que da lo mismo seguir haciéndolo ¿no?
Sabes lo que sigue. Estás lleno de culpa y vergüenza. Rompiste otra dieta. No eres lo suficientemente fuerte. No estás destinado a no perder peso o ponerse en forma. En vez de regresar a tu dieta al día siguiente estás abrumado por la culpa, otra vez, y dices “Al diablo” y continúas haciendo malas elecciones de comida.
Has pasado del “todo” al “nada”. Todo o nada. Lo haces todo bien – comes bien siempre y haces todos tus entrenamientos – o no haces absolutamente nada.
¿Sabes por qué este enfoque es una receta para el fracaso? No puedes ganar. Simplemente no puedes mantener el enfoque de “todo” para siempre. Así que ¿para qué intentarlo? ¿Por qué programarte para el fracaso desde el inicio?
Yo sé por qué. Es porque esa nueva dieta o ese innovador programa de entrenamiento te prometen los resultados que deseas, y tienes que aplicar, sin fallos, sus reglas estrictas. Si puedes tolerar la miseria, privación y agotamiento, entonces tendrás resultados notables más rápido que si tuvieras un enfoque más lento y estable. (Estas son tonterías).
Así que la pregunta es: si el enfoque de todo o nada sólo puede terminar en el fracaso, ¿cuál es la respuesta? ¿Cómo puedes construir, y mantener, un cuerpo en forma y saludable?
Adaptación. Si existiera, ésta sería el arma secreta para el éxito duradero. Éste es el punto medio entre todo y nada.
La vida existe en un estado de oscilación, haciendo que el enfoque de todo o nada sea inútil – la adaptación es el único remedio.
En donde el enfoque de todo o nada trae decepción, vergüenza y fracaso interminable, la adaptación ayuda a la confianza, éxito duradero, e incluso reduce el estrés.
Puedes tratar de hacerlo todo, hasta que termines haciendo nada, o puedes aceptar la adaptación y lograr resultados mantenibles mientras disfrutas el proceso.
Adáptate para Construir un Cuerpo en Forma y Saludable
Si estás listo para construir y mantener un cuerpo saludable y en forma, tienes que aprender a adaptarte. La buena noticia es que es más fácil de lo que crees. Mucha más fácil de hecho, que tratar de seguir un “plan perfecto” sin equivocarse nunca.
Habrá periodos en los que comas bien y nunca faltes a un entrenamiento, pero también habrá tiempos en los que sea más difícil. Aquí hay algunos ejemplos comunes con los que te encontrarás, y cómo adaptarte a ellos:
- Te lesionaste – Siempre puedes hacer algo. Enfócate solamente en lo que puedes hacer y mejora en ellas.
- Sólo puedes ir al gimnasio dos veces esta semana en vez de tres – ve dos veces y haz tus entrenamientos; puedes hacer un tercer entrenamiento en tu casa. Problema resuelto.
- Estás en tu restaurante favorito que tiene la mejor pasta y el mejor cheesecake – Está bien disfrutar tu comida favorita de vez en cuando. Divide la comida con alguien, pide la mitad para llevar o simplemente disfrútala y ya. Cuando sigues guías de nutrición simples, está bien disfrutar tus cosas favoritas de vez en cuando. Esto es mucho más agradable y realista que tratar de evitar una larga lista de comidas para siempre.
- Tu entrenamiento tiene que acabar media hora antes – Haz una cantidad de sets de calidad menor. O haz un entrenamiento que en el que te muevas más y descanses menos para trabajar lo mismo en menos tiempo. Será difícil pero igualmente efectivo.
- Estás en un aeropuerto o restaurante de comida rápida y no tienes opciones saludables de comida – Haz la mejor decisión con lo que tienes disponible.
- Un evento inesperado ocurre y pierdes la motivación para seguir entrenando y comiendo bien – Haz algo. Haz entrenamientos más cortos si es necesario. Come en cantidades más pequeñas si en verdad no tienes mejores opciones disponibles. Adáptate.
Adaptación. Es tu arma secreta para lograr los resultados que quieres, y asegurarte de que los mantengas. Aprende a adaptarte a cualquier situación – en tu alimentación o al ejercitarte – y estarás bien.
La próxima vez que las cosas no vayan como las habías planeado, pregúntate lo único que importa: ¿Qué es lo mejor que puedes hacer con lo que tienes disponible? ¿Cómo puedes adaptarte? Respóndelo y después ejecútalo.